jueves, 31 de enero de 2013

Seguiremos


Acaba de llegarme este vídeo por e-mail. Sólo por ver sus sonrisas ya merece la pena.



martes, 29 de enero de 2013

Palabras y ficciones


Acabo de encontrar esto en mi cuaderno de notas. Y no puedo resistirme a compartirlo.

Presunción de inocencia: toda ficción es cierta mientras no se demuestre lo contrario.

El lector no tiene la culpa.

Don de la soledad: escribimos porque estallamos de urgencia por decirle algo a alguien, y no encontramos a quién.
 
Fragmentos de El equilibrista, de Andrés Neuman.


Jardines de La Granja de San Ildefonso, 2012.

jueves, 24 de enero de 2013

24 de Enero


Hoy hace un año que recibí la llamada más difícil... Hoy no hacen falta palabras.


Orquídeas. Técnica mixta, 2013



lunes, 14 de enero de 2013

¿Quieres un regalo?


Me gusta regalar, hacer regalos. Es algo que ya he dicho. Y esta nueva entrada en mi blog trata de eso mismo. De hacer regalos.
La idea no es mía. Es una divertida propuesta que circula por Facebook. Copio y pego:
Tengamos un 2013 creativo, y empecemos con una bonita y original "cadena de favores". A las primeras cinco personas que comenten este estado las obsequiaré, en algún momento de este año, con un regalo; tal vez un libro, algún postre, música, una carta... una sorpresa. Sin fecha, cuando me sienta inspirado. El juego es el siguiente: esas cinco personas que sean las primeras en comentar también tendrán que hacer lo mismo en sus propios muros de Facebook copiando este mensaje y repartiendo más regalos. ¿Hasta dónde podremos llegar? ¡Empecemos! :)
He decidido trasladar la iniciativa a este blog, y por ello también creo que podría darse un cambio en cuanto a las "condiciones". Si nos quedamos en Facebook, habrá mucha gente que pierda la oportunidad de regalar. Para mí, lo ideal sería mantener esas cinco personas, pero sin importar el medio. ¿Que quieres que uno de esos regalos sea para el hijo de tu vecino? Adelante. ¿Que quieres que tus cinco regalos se destinen a un fin solidario? Adelante también. Aquí sólo está la idea, tú decides cómo hacerla realidad.

Yo reservo dos de los míos, que irán destinados al rastrillo navideño de la AECC (obviamente, de final de año). Quedan 3.
Lo admito. No me gustan las cadenas, las que circulan de e-mail a e-mail, las que se mueven por la red como sombras sin un foco. Pero como he dicho y re-dicho, me encanta hacer regalos. Y me encanta la alegría que se siente al recibirlos. Por ello he seguido ésta. Y sumo otra propuesta. Que esos pequeños regalos, detalles... como quieras llamarlos... sean hechos. Hechos por mí, hechos por ti... Un dibujo, un relato, un cuaderno, una fotografía, un broche, una carta... cualquier cosa que haya sido hecha, literalmente, con todo el cariño.
3 comentarios... 3 regalos.

Colgante de fieltro que le hice a mi padre para el coche

miércoles, 9 de enero de 2013

One Direction

Otra forma de tocar...

Salvando las distancias, me recuerda un poco al "Piano Preparado" de John Cage.




sábado, 5 de enero de 2013

Los Tres Magos


1. EXTERIOR. FRENTE AL HOSPITAL. NOCHE.
    (3:42 a.m.)

Melchor camina desorientado. Cruza la calle sin mirar. Un coche toca el claxon y el Mago sale corriendo de la calzada, sin entender. Murmura algo incomprensible. Cuando se tranquiliza, mira al cielo con los brazos extendidos, las manos abiertas.

MELCHOR
Por fin lo encontré, oh, poderosa estrella Sirio; arropado con sábanas blancas y gigante entre hormigas de ciudad. Fue difícil el camino. Recuerdo cómo aquel primer Mesías se nos reveló sencillo tras el cansado viaje, en un pequeño establo de Belén; rey de reyes; nacido entre animales de granja y adorado por pastores. Éste; el segundo; entre paredes de ladrillo, perdido en un laberinto de cárceles de piedra y asfalto; camellos de colores, sin ojos y sin joroba, que echan humo por el trasero y gritan como trompetas. Lo encontré y me miró, ojos de príncipe; y ofrecí mi presente.
Dudo sobre la situación de los otros Magos. Espero, Sirio, que tu ayuda pueda guiarlos sin problemas hasta el Salvador.

2. INTERIOR. HOSPITAL. MATERNIDAD. NIDOS. NOCHE.
    (7:16 a.m.)

Gaspar se inclina sobre una de las cunas, en el centro de la sala. Sobre ella duerme un bebé vestido de blanco.

GASPAR
Casi no llego. Qué agobio. La túnica y la capa me resultan ahora tan incómodas… En este hospital es imposible no perderse. Doce plantas de pasillos en todas las direcciones, escaleras aquí y allá, ascensores sin nombre. Y ni un solo cartel informativo. Perdóname, chiquitín. Porque para arreglarlo, cuando ya estaba entrando en maternidad, el encargado de un centro comercial de moda me ha confundido con el actor al que tiene contratado para representarme. Quería llevarme con él. A repartir juguetes a los niños. ¡Cuánto me ha costado convencerle de que no era yo! De que yo era yo y no el otro. Son estas ropas persas, tan llamativas. Pero aquí estoy. Y aquí está mi regalo para ti.
Me pregunto cómo les irá a los otros Magos. Ahora veo que Melchor lo ha conseguido, a pesar de venir desde el desierto; él y sus anticuadas costumbres, él que no ha pisado ciudad alguna. ¿Dónde estará nuestro joven amigo Baltasar?

3. INTERIOR. HOSPITAL. MATERNIDAD. NIDOS. DÍA.
    (9:32 a.m.)

Llega el tercer Mago junto a la cuna. Ni rastro de Gaspar. Hay un par de madres con sus bebés, una enfermera en la esquina. El hombre coge la mano del niño, que ya despierto, sonríe y patalea bajo la sábana.

 BALTASAR
PEPE “EL MAGO
¡Mi niño! Mira, nano. Un bibe. ¿Te gusta? ¿Sí? Está nuevecico. Lo he birlao aquí en frente. ¿Tú sabes por qué a tu papá lo llaman Pepe “El Mago”? Pos mira: Papá es mago porque hace desaparecer las cosas de los sitios, y luego aparecen en su bolsillo. ¿Lo ves? Mira cómo se ríe mi nene. Pero, ¿qué es esta chulada de pulsera? Niño, ¡que es oro! ¿De dónde has sacao tú esto? Alguno que se habrá confundío, seguro. Mira lo que pone: Mesías. ¡Bah! Esto lo vendo yo y tenemos pa comprar comidicas y cosas buenas durante un tiempo, ¿verdad, guapo? Si no fuera por la puta de tu madre… No le vuelvo yo a dirigir la palabra a la Mari. Dejarte solo, tan pequeñico… Y todo pa irse con el canalla del Agustín. ¡Habrase visto! Y esta bolsica, ¿qué es? Pero bueno, qué pestazo. Como en las iglesias. ¿A quién se le ocurre meter esto en una cuna? Na, esto lo tiro yo a la papelera ahora mismo y asunto arreglao. Mejor así, ¿verdad, Jesusico? Bueno… di adiós a los demás nenes que nos vamos a casa. Que no se diga que no te enseño a ser educao, ¿eh? Mira ese negro. Vaya pintas. Llega a toda prisa, sudao y vestido de rey Baltasar. Ala, peque, vámonos.

Sagrada Familia, museo. Barcelona. 2011.

martes, 1 de enero de 2013

Feliz 2013


Hoy empieza un nuevo año.
Es inevitabe pensar en los que se han ido, en los que llegan. En lo logrado, en lo vivido, o en lo que un año más se ha dejado de hacer. Y es inevitable, también, pensar en el año que comienza. Se hacen promesas que nunca se cumplen, se planean retos inalcanzables, se espera que todo sea mejor.
Yo sólo quiero que el 2013 sea, al menos, como el 2012. Espero para el 2013 nuevos finales y nuevos comienzos, alegrías, tristezas, y saber que toda mi familia, mis familias, comparten cada día conmigo. Sólo quiero, para el 2013, estar ahí, y que estéis ahí. Porque como hace poco dijo un buen amigo... a mí también, sin comprar un sólo boleto, todos los años me toca la lotería.
Por un 2013 con todos vosotros.


Fotografía de Pedro Pons. Corrubedo, 1994.